Santa María, 13 de enero de 2022. – El Govern ha dado este jueves su apoyo al proyecto estratégico y de diversificación para convertir la pulpa de garrova en nuevos productos, una iniciativa de Cooperatives Agro-alimentàries Illes Balears que supondría la construcción de una planta en Consell para procesar la algarroba en Mallorca y obtener harina, azúcar, fibra alimentaria y taninos para su comercialización y uso en diferentes industrias, como la alimentaria, la farmacéutica o la vinícola.
La presidenta del Gobierno, Francina Armengol, la consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Mae de Concha, y el consejero de Fondos Europeos, Universidad y Cultura, Miquel Company, se han reunido con algunos representantes de las cooperativas impulsoras de la propuesta: Unión Nuts SCL, cooperativa líder de Frutos secos de España, SCL Camp Mallorquín, y Cooperatives Agro-alimentáries de las Islas Baleares.
Este proyecto se podría financiar con fondos europeos a través del PERTE Agroalimentario del Gobierno de España pero también se estudian otras vías de financiación a través otros mecanismos.
Los promotores del proyecto son Camp Mallorquín, Comgar (Cataluña) y Unió Fruits y Unión Nuts (con cooperativas en las Islas, Cataluña, Aragón, Comunidad Valenciana, Murcia y Castilla La Mancha). Que unidas aglutinan el 75% de la producción de algarroba de España.
Según De Concha, se trata de un proyecto que “apuesta por la diversificación y la economía circular, puesto que se aprovecha la totalidad del producto”. “No podemos dejar escapar este proyecto de ninguno de las maneras, es una gran oportunidad también por el relevo generacional, y relacionado con la innovación y la promoción”.
El proyecto, que tiene un coste de aproximadamente seis millones de euros, tiene como objetivo dar valor añadido a la pulpa de garrova para mejorar la rentabilidad del cultivo, garantizar la sostenibilidad del sector agrario y facilitar la incorporación de jóvenes agricultores. Actualmente, de la garrova se aprovecha entre un 10 y un 15% a través de la semilla, y el objetivo es aprovechar también el 80% restante, correspondiendo a la pulpa. Supone la creación de una planta para trocear la garrova a Consejo, donde se obtendrían productos que pueden usarse como sucedáneos de chocolate y cacao, repostería, productos farmacéuticos para reducir el colesterol, como colorante del sector vinícola, etc.
La planta podría llegar a trocear unas 15.000 toneladas de algarroba en el año y beneficiar, solo en Mallorca, más de 1.000 familias de manera directa o indirecta, según los cálculos de Cooperatives Agro-alimentàries. Los impulsores de la iniciativa también han planteado el proyecto desde el punto de vista de la sostenibilidad, planificando el funcionamiento de la planta a través del hidrógeno verde que se genere a la nueva planta de Lloseta.
Según el presidente de Camp Mallorquín, Miquel Gual, “queremos que la garrova en conjunto valga mucho y por eso apostamos para llevar esta planta en Mallorca, que será muy importante para las familias, la sociedad, nuestra isla y economía”.
Según el gerente de Unió Nuts SCCL, Ferran Huguet, “dará valor a la garrova a través de productos novedosos y saludables”.
España es el primer productor mundial de algarroba, con unas 43.000 toneladas anuales (aproximadamente el 50% de la producción mundial). En cuanto a España, las Islas Baleares son quienes lidera la producción, con un 36%. Es un cultivos por los cuales apuesta la consellería de Agricultura, Pesca y Alimentación. De hecho, ha puesto en marcha el Plan de reestructuración de los frutos secos 2021-2027 que, en parte, se nutre de fondos europeos. El mes de octubre de 2021 se convocó una ayuda por valor de 2,3 millones de euros para nuevas plantaciones y replantaciones de almendro y algarrobos, e injertos de algarroba
Las empresas y entidades promotoras del proyecto son, por parte de las Baleares, Camp Mallorquín, Frutos Secos, la cooperativa agrícola de Sant Antoni (Ibiza) y los Servicios de Mejora Agraria y Pesquera (SEMILLA); por parte de Cataluña, Unión Nuts SCCL, Comercial Algarroba SCCL y el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (IRTA); y por parte de la Comunidad Valencia, Unión Frutos SCCL.