Artà 11 de octubre de 2024.- La entidad socia de Cooperatives Agro-alimentàries Illes Balears, la Cooperativa de Artà ha presentado la Comunidad Energética de Artà. Según el presidente de la Cooperativa, Pere Massanet, este proyecto que combina la agricultura y la energía nace con el objetivo de “hacer rentable la actividad agraria para atraer gente joven al sector, ahora que la producción de la energía sostenible es más barata para la gente”.
“El desarrollo de esta Comunidad Energética de autoconsumos compartidos de 100kw consiste en instalar placas solares en altura, en unos 2,05 metros o 2,20 metros para que pueda transitar un tractor por debajo. Se podrán cultivar olivos, almendros o algarrobos que irán rodeando toda la instalación fotovoltaica y entre las placas se pondrán cultivos hortícolas que convengan al terreno. Cada instalación ocupará unos 500 m2 en altura”, tal y como explicaba Albert Ferrer, gerente de la cooperativa. “Aunque no todas las parcelas son óptimas, pero hay muchas en desuso actualmente que sí que podrían entrar dentro del proyecto”. Posteriormente, los vecinos de Artà se pueden poner en contacto con la Comunidad Energética para consumir energía generada por este procedimiento para tener un impacto muy positivo en sus facturas energéticas. “De esta forma, los vecinos del municipio forman una comunidad energética sostenible, que hace frente al cambio climático y a las grandes empresas energéticas”.
Según la directora gerente de Cooperatives Agro-alimentàries Illes Balears, María Francisca Parets, afirma que “nos sentimos muy orgullosos de que una entidad socia nuestra cree la Primera Comunidad Energética de fórmula cooperativa de Illes Balears. Gracias a este proyecto, la cooperativa de Artà promueve las energías renovables alineada con los ODS que tenemos que cumplir en el año 2030”
La intención es poner en marcha esta Comunidad Energética a lo largo de 2024, con 5 instalaciones dentro de Artà en fincas próximas de la zona urbana -la legislación establece que las parcelas tienen que estar a menos de 2 kilómetros del pueblo y se tienen que poder conectar a la red eléctrica-. La inversión inicial prevista es de 1,4 millones de euros con una capacidad de generación de 1 millón de kWh al año, suficientes para abastecer a 300 viviendas. La segunda fase, ya en el año 2025, significaría crecer hacia la Colonia de Sant Pere incorporando más explotaciones en desuso, con una inversión de 2,8 millones de euros para generar unos 2.000.000 de kWh anuales (alrededor de 600 viviendas más). “Hay dos tipos de socios” explicaba el gerente de la Cooperativa “aquellos que ceden tierras y el socio consumidor, que quiere comprar energía más barata para su vivienda o negocio”.
“Artà puede crear un proyecto único vínculo de agricultura y energías sostenibles” coincidieron a decir los dos expertos en energía Pedro Vaquer y Jaume Sureda, quien definía la iniciativa como “pionera” en Baleares y que permitirá en “todas las casas de Artà, entre 2025-26 consumir energía más barata sin necesidad de invertir. Estos socios consumidores pagarán una cuota y tendrán acceso, a través de la cooperativa, a una parte de la energía que produzcan estas instalaciones fotovoltaicas, en función de su consumo”.
Para más información se puede consultar el espacio de la web de la Comunidad Energética de Artà